En la presentacíon del viernes aparte de obligarle a Manel que me firmara el Nº 1 de BD Banda, me enteré de que se había vendido un ejemplar de Breogán, del que también esa noche compró uno Suso Cubeiro, y no íba ser Manel el único obligado a dedicar, ya que no me había lllebado el rotulador, aproveché para estrenar uno que me regaló Manel y un lapiz del IKEA que llevaba el.